« Trata a los demás como quieras que te traten a ti»
Esta regla es un corolario de la Ley de Tres y una buena
guía para manejarnos en la vida. Aunque la gente puede
querer ser rracada de muchas maneras diferentes, la Regla
de Oro nos hace responsables de nuestras acciones y
sus consecuencias.
Los wicanos no se confiesan ni pueden obtener una absolución
de sus pecados; se espera de ellos que se enfrenten
a sus actos y se hagan cargo de sus errores. Si fallan,
examinan lo que hicieron mal y el motivo que les impulsó
a hacerlo. De esta manera, uno se hace más consciente y
puede evitar tales problemas en el futuro. Si es posible,
siempre se enmienda la situación en el momento presente. |