Esta es la norma de conducta fundamental del iniciado.
siempre y cuando no salga nadie perjudicado.
Esto implica que una persona debería estar siempre
atenta a las muchas consecuencias que puede tener su conducta,
a cómo reaccionarán los demás. Si alguien puede
resultar perjudicado, se evalúan los diferentes niveles de
perjuicio y se escoge la acción que causará menos daño.
Este principio no da nada por sentado y conduce a vivir
ecológicamente y a tratar con sumo cuidado el planeta.